Una oferta más amplia de seguros con mayores coberturas en cuanto a edades de ingreso y permanencias de afiliación son algunas de las mejoras que se han introducido en la industria de los convenios y seguros de vida con prestaciones para adultos mayores en los últimos dos años.
Es que con el aumento en la expectativa de vida de las personas mayores en Chile (que en el caso de los hombres se ha alargado 24 años, llegando a los 84 años, y en las mujeres 30 años, llegando a los 89), ajustar los planes de salud para estar bien preparados para la vejez es algo primordial.
En función de este fenómeno y según el vicepresidente de la Asociación de Aseguradoras de Chile, Jorge Claude, las compañías han ido creando productos especiales para la tercera edad y por otra parte muchos de los productos ya existentes han visto un aumento de las edades tope en que los asegurados pueden permanecer debido al alza en la expectativa de vida de los adultos mayores. Así, hoy en día se pueden encontrar pólizas que cubren hasta los 100 años, con primas desde $7 mil hasta $22.500 mensuales.
“Este tipo de productos ha experimentado una alta demanda por el encarecimiento de los planes de salud previsional con la edad y la disminución de coberturas, entre otros factores. La industria ha ido ofreciendo cada vez más productos que apuntan a esto y en su gran mayoría cubren hasta edades avanzadas, la mayor parte, eso sí, deben contratarse antes de los 65 años”, explica el vicepresidente de Asociación de Aseguradores de Chile, Jorge Claude.
Optar por una aseguradora
Una de las alternativas más comunes entre las personas mayores es contratar una póliza complementaria orientada a rembolsar los gastos originados por enfermedades o accidentes catastróficos que puedan ocurrir y que no alcanzan a ser cubiertos por el plan de salud previsional del asegurado, superado el deducible correspondiente.
En este sentido, Consorcio Seguros ofrece una alternativa que cubre el rembolso de gastos de hospitalización y ambulatorios originados por enfermedades y accidentes cubiertos. El monto máximo de reembolso es de 15 mil UF por asegurado y por evento, con una duración máxima del evento de tres años, y tiene una tarifa de referencia de 0,43 UF mensuales para personas desde 56 a 60 años y de 0,52 UF para personas desde 61 a 64 años. La duración máxima de la cobertura dependerá del seguro de vida contratado, pudiendo llegar a ser hasta los 100 años.
“En este caso, no se aplica deducible a cirugías, accidente vascular encefálico, cáncer o enfermedades cerebrales, entre otros”, indica Tomás Carvallo, subgerente seguros de vida individual de Consorcio.
Asimismo, con cobertura hasta los 90 años de edad, MetLife Salud ofrece coberturas de alto costo y reembolso de gastos médicos con deducible. Entre sus ventajas destaca que el prestador de salud es de libre elección del asegurado. Además, hasta los 70 años la prima es fija y a partir de ese momento y dependiendo del plan, hay ajuste en el monto máximo de reembolso y deducibles.
“También incluye cobertura para eventos ocurridos en Chile y el extranjero, tanto para medicamentos hospitalarios como para atenciones médicas y puede ser contratado por personas sin sistema de salud”, explican desde la aseguradora MetLife.
En cuanto a las primas, estas dependen del número de asegurados, del tipo de plan contratado y se inician con un costo de 0,3 UF. Por ejemplo, para un cliente de 45 años el plan de 10 mil UF de cobertura tiene una prima de 0,3 UF, este valor se mantiene fijo hasta los 70 años, y a partir de esa fecha, se modifica cada cinco años.
En Sura, en tanto, la póliza Más Salud es un seguro catastrófico que reembolsa hasta el 100% de las prestaciones ambulatorias y hospitalarias ocurridas por una enfermedad o accidente, después de hacer uso del plan de salud en isapre o Fonasa, con un deducible desde 100 UF. En este caso, el capital asegurado es de 35 mil UF por persona y evento, y cumplidos los 70 años este capital se reduce a 10 mil UF. Esta póliza también cubre un 50% de gastos en el extranjero y su renovación anual está garantizada hasta cumplidos los 100 años.
“La edad de contratación va desde los 18 y hasta los 65 años, no obstante, es clave contratarlo lo antes posible, disminuyendo de esta manera la posibilidad de registrar preexistencias que podrían quedar excluidas de la cobertura del seguro”, dicen en Sura.
La prima de este producto en el tramo entre 61 y 65 es de 0,990 UF mensuales (11,98 UF anuales) y el deducible a contar de los 65 años pasa de 100 UF a 150 UF.
Las ofertas en clínicas
Clínica Las Condes cuenta con el Seguro Integral, con cobertura hasta los 100 años sin límite de edad para el ingreso y con renovación garantizada hasta esa edad.
Este seguro cubre el 100% de los gastos hospitalarios y ambulatorios codificados por la isapre. La cobertura de este gasto se activará si el gasto médico es mayor al deducible de la póliza.
A partir de los 75 años este seguro tiene un capital asegurado de cinco mil UF, mientras que el deducible es de 150 UF. El costo de la prima bruta mensual a los 75 es de 3,30 UF, mientras que a los 60 años, la prima mensual es de 2,04 UF.
Por su parte, el seguro catastrófico Salud Total de la Clínica Santa María protege contra enfermedades de alto costo y reembolsa hasta el 100% de los gastos médicos, hospitalarios y ambulatorios incurridos en Clínica Santa María, una vez superado el deducible.
Hasta los 70 años la póliza contempla deducible costo cero para el primer evento asociado solo a las enfermedades y prestaciones dentro del contrato, como cáncer, infarto al miocardio, accidentes vasculares cerebrales, insuficiencia renal crónica, etc.
Para titulares, la edad máxima de ingreso será hasta los 70 años y permite cobertura hasta los 90. Los valores de estas pólizas se mueven entre las 1,8 UF (desde los 61 años), hasta las 5,8 UF mensuales (90 años).
Con todo, el consejo en general para todos quienes contratan seguros, es comparar y verificar si lo que está eligiendo beneficia a la situación particular, además de considerar la prima y las coberturas.
“Las características principales que se deben mirar son si la cobertura tiene deducible y cuánto es, si existen límites de cobertura y cómo se determinan (por asegurado, por enfermedad, otro), el precio, las exclusiones, si es una póliza de renovación automática o no, como es el tratamiento y cobertura de las enfermedades preexistentes, y si existen prestadores preferentes o exclusivos en los que se debe atender o son coberturas de libre elección”, dice Jorge Claude.
Fuente: Daniela Paleo / El Mercurio